![]()
El producto interno bruto (PIB) de Estados Unidos creció a una tasa anual del 4,7 por ciento en el segundo trimestre. En el tercer trimestre esta cifra descendió al 2,4 por ciento, según el servicio privado de análisis económico, Blue Chip Economic Indicators. En el primer trimestre, el crecimiento fue del 2,0 por ciento.
"Lo que sucedió en el tercer trimestre es que el ingreso de la gente aumentó, descendió el consumo y aumentó el ahorro", manifestó, en una entrevista celebrada el 21 de octubre, Lee Price, recientemente nombrado economista principal del Departamento de Comercio. Otro factor fue que los prestamistas, sobre todo los que expiden tarjetas de crédito, fueron más lentos en la concesión de crédito debido al aumento de las faltas de pago.
Dado que el gasto del consumidor representa dos terceras partes del PIB, los cambios que experimenta tienen un efecto importante. "Los consumidores también cambian de un trimestre a otro", añadió Price, quien explicó que los aumentos o descensos del gasto del consumidor no indican, necesariamente, cambios fundamentales en la economía.
Price predijo que en el cuarto trimestre, durante la temporada de las compras navideñas, los consumidores gastarán algo de lo que han ahorrado. El Blue Chip Economic Indicators prevé un crecimiento del 2,4 por ciento para todo el año 1996, lo que está considerado por la mayoría de los economistas como el nivel que puede sostener actualmente la economía de Estados Unidos.
La economía también sigue arrojando los niveles más bajos de desempleo e inflación de los últimos años.
En septiembre, la tasa de desempleo aumentó ligeramente al 5,2 por ciento, del 5,1 por ciento registrado en agosto, lo que todavía supone la cifra más baja de los últimos siete años. Sin embargo, la nómina arrojó un descenso de 40.000 empleos en septiembre. Esto suponía un marcado contraste con el aumento medio de más de 200.000 empleos al mes desde comienzos de 1996. El descenso se produjo como resultado de una "aberración estadística", afirmó Price, pero agregó que el número de empleos que se está creando había descendido considerablemente en relación con los últimos meses.
"El cambio registrado en un mes no es necesariamente un presagio de otra cosa que un rebote al mes o al trimestre siguiente" advirtió.
Conforme a los indicadores del índice de precios al consumidor (IPC), la inflación también se mantiene a niveles muy bajos. En septiembre, el IPC subió sólo un 0,3 por ciento. Price afirmó que el incremento del IPC para el año debería ser de menos del 3 por ciento por quinto año consecutivo.
La producción industrial aumentó sólo 0,2 por ciento en septiembre, muy por debajo del promedio de los cinco meses anteriores. En septiembre, la utilización total de la capacidad industrial fue del 83,7 por ciento. El año pasado, la capacidad industrial disponible en los centros industriales de Estados Unidos aumentó en más de un 4 por ciento como resultado de la inversión, afirmó Price.
Añadió que la expansión económica actual no parece estar terminando. "Hemos experimentado una expansión de cinco años y medio, y, por lo general, en este punto del ciclo de los negocios, se observan más desequilibrios, pero, realmente, no vemos que estén surgiendo graves desequilibrios".
"Todavía estamos tratando de averiguar de lo que es capaz esta economía", afirmó Price, y añadió que la productividad está mejorando y la fuerza laboral está creciendo, dos elementos necesarios para obtener ingresos más altos y crecimiento continuo.
Perspectivas
Económicas
Publicaciones Electrónicas de USIS,
Vol. 1, No. 16, noviembre de 1996.