Por Louis J. Freeh, director
de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI)
En esta adaptaci�� de un discurso pronunciado ante la Conferencia de 1997 de la Asociaci�� de Jueces Federales, Louis J. Freeh, director de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI), habla acerca de las nuevas formas del crimen transnacional que la oficina debe enfrentar, y la importancia que se da a la integridad y la ��ica en el entrenamiento de los agentes del FBI.
La Oficina Federal de Investigaciones va expandiendo sus programas internacionales en maneras que se traducir�� en nuevos casos y asuntos investigativos en los tribunales. Encontramos que la naturaleza del crimen -- particularmente el crimen econ��ico y, por cierto, en lo que respecta a las drogas, el crimen organizado y el terrorismo -- adquiere cada vez m�� una naturaleza mundial. Las tendencias transnacionales, con respecto a estos tipos de cr��enes, han aumentado espectacularmente.
Recientemente nos ocupamos de un caso en el que un individuo sentado en San Petersburgo, Rusia, frente a una computadora port��il, se abri?paso hasta una cuenta del Citibank de Nueva York y pudo transferir varios millones de d��ares antes de que el propio banco identificara la jugada. La p��dida lleg?a 400.000 d��ares, pero fue una lecci�� para la aplicaci�� de la ley y para el banco. Comprendimos, a trav�� de esa experiencia, que vamos a tener que bregar cada vez m�� con este nuevo tipo de crimen.
Encontramos que el advenimiento de la Internet y las computadoras ha creado realmente, desde el punto de vista de la aplicaci�� de la ley, un terreno de operaciones completamente nuevo. Ahora perseguimos fugitivos no s��o tratan de escapar saltando las verjas traseras de una casa, sino que tambi�� lo hacemos a trav�� de la Internet.
Nuestros agentes encargados de ejecutar las ��denes de cateo se apoderan ahora, en la mayor�� de los casos, de directorios computarizados y computadoras, adem�� de registros y libros. Creo que llegaremos muy r��idamente a un punto donde las cuestiones referentes a las pruebas, al igual que el alcance y el enfoque de las ��denes judiciales -- ya se trate del T��ulo III o de las ��denes de cateo -- cambiar�� radicalmente debido a las nuevas tecnolog��s, y debido a la manera en que genera, almacena y transmite la informaci��.
PUNTOS VULNERABLES DE LA INFRAESTRUCTURA DE LA INFORMACI��
Esta nueva percepci�� tecnol��ica nos ha hecho crear programas que trabajan activamente para identificar puntos vulnerables de nuestra infraestructura. Es ahora evidente que con respecto al terrorismo, al igual que respecto a la actividad criminal, nuestras infraestructuras -- particularmente las de naturaleza esencial -- son ��eas de vulnerabilidad muy pronunciadas. Por ejemplo, incluso un individuo de habilidad moderadamente refinada podr�� atacar los sistemas de informaci��. A medida que esos sistemas se vuelven m�� vulnerables, hacen que sean mayores las oportunidades de que criminales y terroristas causen gran da��. Por ejemplo, un ataque a un mercado de valores, o a una red de distribuci�� de electricidad en el nordeste de Estados Unidos en mitad del invierno, podr�� afectar severamente tanto vidas como propiedades. Encontramos que este es un aspecto en el que necesitamos estar mucho mejor preparados.
EL LABORATORIO DEL FBI
Desafortunadamente, algunos de los puntos vulnerables de nuestra infraestructura de informaci�� se reflejan en nuestra infraestructura organizativa: me refiero espec��icamente al laboratorio del FBI, donde, como resultado de un informe del Inspector General, hemos instalado unidades de seguridad de buena calidad, de las que no dispon��mos hasta ahora, ex��enes rec��rocos entre el personal y m�� cient��icos para operar el laboratorio. Hemos llevado al laboratorio, por primera vez en nuestra historia, muchos cient��icos civiles, y creo que el resultado final ser?un laboratorio mucho m�� poderoso. Por ejemplo, el laboratorio del FBI fue recientemente responsable de la excarcelaci�� de un preso que hab�� pasado nueve a��s en prisi��, declarado culpable en un caso en el cual el laboratorio, en un examen posterior, pudo descubrir pruebas exculpatorias. Nuestra unidad de ADN, que lleva a cabo ex��enes por cuenta de las autoridades federales, estatales y locales, absuelve al sospechoso en el 25 por ciento de sus ex��enes.
Llevamos a cabo en nuestro laboratorio aproximadamente 600.000 ex��enes por a��. Les hemos dado informaci�� sobre esos ex��enes a los fiscales, que en algunos casos las transmiten a los abogados defensores y a los acusados, y son probablemente materia de mociones en los tribunales. Hasta ahora, no sabemos de ning�� caso estatal o del FBI que haya sido comprometido por los hallazgos y la cr��ica del laboratorio del FBI. Contamos en ese laboratorio con muchos, muchos hombres y mujeres que trabajan con dedicaci��.
Estamos construyendo un nuevo laboratorio del FBI en Quantico, Virginia, en nuestras instalaciones de adiestramiento. Ese laboratorio quedar?completado para fines de esta d��ada. Ser? un laboratorio de vanguardia, un laboratorio escuela de primera clase donde cient��icos tanto estatales como locales continuar�� practicando los ex��enes forenses que han dado renombre al laboratorio del FBI. Tenemos confianza en que seguir?siendo lo que es ahora, el principal laboratorio forense del mundo.
AMENAZAS A MIEMBROS DEL PODER JUDICIAL
Hablar?ahora un poco acerca de las investigaciones en las que trabajamos, que se refieren a las amenazas a jueces, magistrados y empleados de los tribunales.
En mis viajes por el pa��, muchos jueces me preguntan si el n��ero de amenazas es significativamente mayor. Puede parecer que s? pero nuestras estad��ticas demuestran otra cosa. En 1996, por ejemplo, se nos hizo llegar, y trabajamos en ellas en calidad de casos investigativos, 45 amenazas separadas a jueces federales, y una cifra menor de amenazas a otros empleados tribunalicios. Las amenazas a los jueces del Tribunal Supremo, que clasificamos en una categor�� separada, han permanecido relativamente escasas en los ��timos a��s. Tomamos muy, muy en serio esas amenazas. Trabajamos en ellas r��ida y diligentemente, y entregamos informes abarcadores de los resultados de esos ex��enes.
Esos casos son para m?motivo de especial sensibilidad, dado que la ��tima acusaci�� que sostuve como fiscal federal adjunto involucr? el asesinato de un juez, caso que llev?hasta el tribunal del Distrito Sur de Nueva York -- se trat?del juez Richard J. Daronco, que fue asesinado. Puedo asegurarles a ustedes que el FBI, junto con el Servicio de Alguaciles, estudia exhaustivamente esos casos.
La mayor�� de las amenazas se neutralizan debido a la clase de gente que las hace. En muchos casos, proceden de presos y gente que tiene antecedentes psiqui��ricos. Hacemos todo lo posible para neutralizarlas tan pronto como se pueda.
Los miembros del poder judicial nunca deber��n estar en una situaci�� en la que han recibido una carta o una llamada amenazante, lo han informado y no han o��o ninguna respuesta de parte nuestra. Si ellos creen que est�� en una situaci�� semejante, deben entrar en contacto con nuestro agente especial local a cargo (SAC). A todos los SAC se les advierte que deben mantener a los miembros del poder judicial al d�� en lo que respecta al avance de esas investigaciones, de una manera tan abarcadora como les sea posible.
ADIESTRAMIENTO ETICO EN EL FBI
Nos encontramos en una etapa muy din��ica de nuestro desarrollo. Hay en este momento alrededor de 75.000 solicitantes de plazas de agente especial, y casi todos ellos tienen las calificaciones b��icas para desempe��r ese trabajo. Contratamos alrededor de 1.000 agentes por a�� -- en parte para compensar una congelaci�� de contrataciones que se remonta a 1992 y 1993, pero en su mayor�� gracias a los nuevos recursos que hemos recibido del Congreso. Para fines de 1998 habremos contratado, en los ��timos cuatro a��s, alrededor del 40 por ciento de nuestra fuerza de trabajo. Esto representa un cambio enorme. En el ��timo par de a��s hemos presenciado muchos retiros y el ingreso de toda una generaci�� nueva de agentes del FBI.
Nos preocupa mucho la ense��nza e instrucci�� tempranas de estos nuevos agentes, particularmente en lo que respecta a las cuestiones de integridad moral y ��ica. Cuando asum?este puesto en 1993, me enter?de que la porci�� del curr��ulo reservada a la ��ica hab�� sido relegada a la 14ta. semana de un curso de 16 semanas. Se ocupaba muy por encima de las obligaciones ��icas que corresponden a los oficiales de aplicaci�� de la ley. Luego de ir hasta Quantico y plantearles a los nuevos agentes preguntas acerca de cuestiones hipot��icas, sent?que hab�� necesidad de una instrucci�� m�� abarcadora sobre ��ica.
JUECES VISITANTES Y ETICA DE LA APLICACI�� DE LA LEY
Con ese prop��ito, comenc?mi programa de jueces visitantes. Muchos jueces han venido a Quantico a pasar el d�� con nuestros nuevos agentes. Los jueces no dictan simplemente conferencias acerca de la funci�� de los tribunales federales y las relaciones entre tribunales, jueces, fiscales e investigadores. Les destacan a los agentes, como yo creo que s��o un juez puede hacerlo, la importancia esencial de la integridad de nuestra labor y la ��ica que debemos imprimir en nuestra profesi��.
Adem�� del programa de jueces visitantes, hemos creado un curr��ulo en el que los primeros dos d��s del adiestramiento de un nuevo agente se dedican a la ��ica de la aplicaci�� de la ley. Por ejemplo, en el escenario de un robo a un banco, los agentes encuentran pruebas que resultan exculpatorias -- pruebas que contradicen la presunci�� de sospecha del sujeto que ha sido identificado y la teor�� construida en torno al caso.
El problema consiste en instruir a los agentes sobre qu?hacer con esa prueba particular, y explicar la necesidad de que la destaquen ante sus supervisores o el fiscal federal adjunto. Les ense��mos que la importancia de proteger los derechos constitucionales es realmente mayor que el resultado de una entrevista, o el resultado de una investigaci�� en particular. Hemos intercalado en el curr��ulo muchas m�� oportunidades de discutir y ense��r acerca de este valor central e importante, no s��o para el FBI sino para todas las agencias federales que investigan asuntos criminales para el gobierno de Estados Unidos.
Hemos establecido en Quantico una Oficina de Etica de la Aplicaci�� de la Ley, y hemos ordenado a trav�� de nuestra junta que los empleados reciban varias horas de instrucci�� cada a�� acerca de las sutilezas de la ��ica y la integridad en la aplicaci�� de la ley.
ACADEMIA INTERNACIONAL DE APLICACI�� DE LA LEY
Hemos tratado tambi�� de exportar un poco de esto a nuestra ense��nza a nivel estatal y local, al igual que al adiestramiento que ofrecemos en el extranjero. En 1994 establecimos en Budapest la Academia Internacional de Aplicaci�� de la Ley. El Departamento de Estado, junto con el FBI y otras agencias federales, la estableci?para instruir a toda una nueva generaci�� de oficiales polic��cos que llegan de Rusia y de la antigua Uni�� Sovi��ica, los pa��es b��ticos y otros pa��es de Europa Central y Oriental. La academia de ocupa principalmente de la ciencia de la pr��tica policial en una democracia, la cual es, por supuesto, muy diferente de la pr��tica policial en un pa�� no democr��ico.
En cada sesi�� de ocho semanas reunimos a tres pa��es a la vez, tres conjuntos diferentes de oficiales polic��cos a quienes se les ofrece traducci�� simult��ea. Estos son oficiales polic��cos que, en la mayor�� de los casos, trabajaron como polic��s civiles bajo gobiernos totalitarios ya desaparecidos.
El primer curso que les dictamos se refiere a la dignidad humana, y hace hincapi?en la autoridad esencial que tienen los oficiales de aplicaci�� de la ley, al igual que la necesidad de una conducta ��ica, confiabilidad e integridad en su profesi��. Nos complace mucho ver que, cuando los estudiantes califican los cursos, el que recibe las notas m�� altas es el que trata de la dignidad humana. Esto significa un buen reflejo en t��minos de lo que ense��mos y lo que creemos que se necesita en esos pa��es.
AGENCIAS COORDINADORAS DE LA APLICACI�� DE LA LEY
Finalmente, quisiera hablar de algunas iniciativas nuevas para coordinar mejor la labor de las agencias de aplicaci�� de la ley a nivel federal, y tambi�� a los niveles estatal y local. Estas iniciativas deber��n traducirse en casos mejores, casos que se eval��n mejor antes y no despu�� de presentar la acusaci��. Nuestros SAC operan en el terreno en relaci�� muy estrecha con sus contrapartes de la Oficina de Alcohol, Tabaco y Armas de Fuego (ATF) del Departamento de Hacienda, y la Administraci�� de Control de Drogas (DEA) del Departamento de Justicia, especialmente all?donde tenemos grupos de trabajo. Disponemos de 152 grupos de trabajo en todo Estados Unidos, en los que los agentes del FBI trabajan asociados con oficiales federales, estatales y locales que forman, a su vez, grupos de trabajo sobre pr��ugos, crimen violento o unidades conjuntas que se ocupan del terrorismo. Su objetivo es garantizar que los casos se eval��n apropiadamente antes de presentar la acusaci�� o someterlos a juicio. Garantizan tambi�� que estemos empleando nuestros recursos de un modo prudente y de una manera coordinada.
Hemos establecido asociaciones similares con la CIA y el Departamento de Estado a nivel de seguridad nacional. Creo que esta coordinaci�� nos ha permitido obtener la mejor cooperaci�� posible con que hemos contado en muchos, muchos a��s.
Cuando viajo por el pa��, trato de aprovechar las oportunidades de reunirme con jueces y sus colegas. Visito una oficina del FBI aproximadamente cada dos semanas. Parte de estas visitas es la oportunidad de reunirme con los jueces, si no con el juez presidente, con algunos de los otros, para hacer dos cosas: primero, presentarme yo mismo; y, segundo, preguntar qu?podr��n hacer mejor el FBI y qu?podr��n hacer mejor las autoridades federales de aplicaci�� de la ley en ese distrito en particular -- la calidad de los casos que se someten a los tribunales; la calidad de las pruebas presentadas y la calidad de los agentes. A lo largo de tres a��s y medio, he recibido una tremenda retroinformaci�� e informaci��, y estoy muy agradecido por ello.
Gracias.
Haga un click para leer una explicaci�� breve de las responsabilidades federales y estatales de ejecuci�� de la ley en Estados Unidos.
Temas de la
Democracia
Publicación Electrónica de USIS, Vol.
2, No. 4, noviembre de 1997