La Agencia de Estados Unidos para el Control de la Droga (DEA) está involucrada activamente en las gestiones de educación y prevención del consumo de drogas dirigidas a reducir la demanda de estupefacientes en este país. Estas gestiones se coordinan por medio del Programa de Reducción de la Demanda de la DEA, el cual fue creado oficialmente en 1986. El Programa se creó en respuesta al hecho de que para organizar un ataque general contra el problema de las drogas deben emprenderse acciones para reducir la demanda de estupefacientes e impedir el uso indebido de drogas antes de que ocurra. Con ese fin, la misión del Programa de Reducción de la Demanda de la DEA es proveer liderazgo en coordinar y facilitar la participación de las agencias de ejecución de la ley y de la comunidad en las actividades de educación y prevención del consumo de drogas.

El Programa de Reducción de la Demanda de la DEA es operado principalmente por agentes especiales de la DEA, a quienes se conoce como Coordinadores de Reducción de Demanda (CRD), ubicados en cada una de las 22 divisiones de campo de la agencia. El papel de los CRD es brindar dirección y apoyo a las agencias y organizaciones locales a medida que desarrollan programas de educación y prevención del consumo de drogas dirigidos a satisfacer sus necesidades específicas. En su condición de agentes especiales, los CRD llevan una perspectiva única al campo de la prevención del consumo de drogas. Tienen una comprensión clara de la situación de las drogas en general y una amplia gama de experiencia en trabajar con otros organismos policiales, así como con organizaciones cívicas y empresariales. Los CRD comparten este conocimiento y experiencia con grupos que desean orientación y dirección acerca de la manera de iniciar y operar programas de prevención del consumo de drogas.

Con el aporte de los CRD, la Sección de Reducción de la Demanda en la sede central de la DEA designa áreas de prioridad en las cuales concentrar las actividades de educación y de prevención del consumo de drogas. Las actuales áreas prioritarias nacionales son educación antilegalización, adiestramiento policial, programas juveniles, drogas en el lugar de trabajo, conciencia de drogas en los deportes y creación de coaliciones.

Educación contra la legalización: Aunque las encuestas indican que el público se opone fuertemente a toda acción para legalizar las drogas, hay quienes siguen promoviendo la legalización y otros la consideran ampliamente. Como resultado de ello, la DEA participa activamente como opositora en el debate sobre la legalización a fin de aumentar el conocimiento público sobre las cuestiones en torno a los conceptos erróneos sobre la legalización de las drogas. Con el objeto de brindar una comprensión mejor de estas cuestiones, la DEA ha creado una publicación llamada "Speaking Out Against Drug Legalization" (Pronunciamiento en contra de la legalización de las drogas), la cual constituye una guía práctica que asiste a oficiales de policía y a dirigentes comunitarios en la tarea de elaborar argumentos contra la legalización.

Esta publicación también es una buena guía de recursos porque le proporciona al lector hechos y cifras fidedignos, bien documentados que contrarrestan muchas de las afirmaciones de los expertos de la legalización. Además de esta guía, la DEA provee adiestramiento y seminarios contra la legalización a grupos policiales y organizaciones comunitarias, para ayudarlos a prepararse para hablar en foros públicos sobre la cuestión de la legalización.

Adiestramiento policial: La DEA ha asumido un papel rector en proveer adiestramiento en materia de reducción de la demanda de drogas a los organismos policiales. Por medio de esta acción la DEA procura mostrar a los oficiales policiales la manera en que pueden influir en el problema de las drogas fuera del campo policial, mediante la asistencia a sus comunidades locales para que desarrollen estrategias de educación y prevención del uso de drogas. Con ese fin, los CRD actúan como instructores en las academias y escuelas policiales estatales y locales y en el adiestramiento para oficiales del programa "Drug Abuse Resistance Education" (DARE o Educación sobre Resistencia al Uso Indebido de Drogas). También proporcionan asistencia a los coordinadores estatales de reducción de demanda y brindan adiestramiento en conferencias nacionales y estatales de organizaciones como la Asociación Internacional de Jefes de Policía, la Asociación Nacional de Alguaciles y el Consejo Nacional de Prevención de la Delincuencia.

Programas juveniles: La DEA apoya enérgicamente programas juveniles bien desarrollados que ayudan a los niños a mantenerse libres de drogas. Según el informe de 1994 de la Universidad de Michigan respecto al estudio sobre el control del futuro, el uso de drogas entre nuestros jóvenes ha venido aumentando durante los últimos tres años, tras una declinación durante varios años. Teniendo presente esta tendencia preocupante, la DEA hace hincapié en brindar a los niños los instrumentos que necesitan a fin de resistir la presión para que usen drogas. Por ejemplo, la DEA apoya el programa DARE (Educación sobre la Resistencia al Uso Indebido de Drogas), como una acción bien organizada para llegar a los jóvenes con mensajes eficaces de prevención y para aumentar su conocimiento sobre los riesgos del consumo de drogas. Además, el programa Network 3 (Red 3) de la DEA proporciona a los jóvenes de grupos étnicos minoritarios y de alto riesgo en las escuelas de vecindarios urbanos pobres en Camden (Nueva Jersey) y Washington (D.C.), una variedad de actividades positivas como alternativa a las drogas. En su condición de socio activo del Programa de Exploradores Policiales de los Boy Scouts de Estados Unidos, la DEA proporciona estructura y dirección a los jóvenes interesados en carreras policiales. Los CRD también participan en programas escolares de adopción y orientación, así como en programas que reconocen los logros positivos de los jóvenes que no consumen drogas.

Drogas en el lugar de trabajo: El uso indebido de las drogas cuesta a las empresas y a la industria miles de millones de dólares anuales en pérdida de productividad, accidentes laborales y ausentismo. Para ayudar a los empleadores a comprender e identificar el uso de drogas en el empleo, así como a desarrollar programas de prevención del uso de drogas en el lugar de trabajo, los CRD, en cooperación con organizaciones locales como las Cámaras de Comercio, proveen conferencias de adiestramiento y seminarios sobre "drogas en el lugar de trabajo" a compañías en todo el país. Por medio de esta acción, los empleadores pueden hacer más seguro y productivo el lugar de trabajo, detectando el abuso de drogas y actuando para resolverlo por medio de programas contra las drogas en el ámbito laboral.

Conciencia de drogas en los deportes: El Programa de Reducción de la Demanda de la DEA comenzó por medio de esta iniciativa, que utiliza la influencia positiva de los técnicos sobre los atletas --desde las ligas juveniles hasta las profesionales-- como un instrumento para combatir el uso indebido de las drogas. Por medio de esta acción, la DEA proporciona adiestramiento a los técnicos de escuelas secundarias para ayudarlos a desarrollar programas de prevención de drogas para sus programas atléticos escolares, y trabaja con personalidades deportivas conocidas en iniciativas contra las drogas. Además, la Sección de Reducción de la Demanda trabaja estrechamente con la Asociación Nacional de Técnicos de Atletismo de Escuelas Secundarias, la Federación Nacional de Asociaciones Estatales de Escuelas Secundarias y la Asociación Nacional de Atletismo de Colegios Universitarios en el adiestramiento de los técnicos para que cumplan papeles de liderazgo en la prevención del uso indebido de drogas en sus escuelas.

Coaliciones: La DEA trabaja en estrecho contacto con las comunidades interesadas en establecer coaliciones comunitarias para atender los problemas de drogas que plagan a sus vecindarios. En la creación de estas coaliciones, la DEA hace hincapié en la necesidad de la participación de todos los segmentos de la comunidad --policía, escuelas, gobierno, comercio e industria, iglesias y la prensa-- a fin de organizar una respuesta coordinada a las cuestiones locales relacionadas con las drogas. A fin de apoyar a las coaliciones locales, la DEA proporciona orientación para su establecimiento y fue un participante importante en la fundación de coaliciones en Los Angeles, Dallas y Richmond (Virginia). La DEA también proporciona adiestramiento sobre desarrollo de estrategias e identificación de recursos a miembros de las coaliciones con base en la comunidad.

En conjunto con el Programa de Reducción de la Demanda, la DEA ha producido una cantidad de publicaciones que brindan información general y orientación sobre cuestiones en el campo de la prevención del uso indebido de drogas.